Ahora que es época de viajes, muchas veces para exprimir más los días, salimos o volvemos de viaje de noche. No hay que dejarse llevar por la euforia del viaje, ya que conduciendo de noche corremos ciertos riesgos y hay que estar atentos a una gran cantidad de factores.
¿Quieres conducir de noche de forma segura? En este artículo podrás descubrir algunos consejos necesarios para que tus viajes sean siempre lo más seguros posible.
Todos sabemos que conduciendo de noche la percepción visual se reduce en gran cantidad, por lo que el riesgo de sufrir un accidente puede aumentar. De hecho, la mayoría de los accidentes en España ocurren durante el día, pero por la noche, aunque la cifra de accidentes desciende, el porcentaje de mortalidad es mayor.
Desde bp queremos, con estos consejos, ayudar a reducir el porcentaje y ayudarte a sentirte más seguro conduciendo de noche. ¡Arrancamos!
Siempre es aconsejable mantener la distancia de seguridad entre coches, pero de noche es mucho más importante, debido a que cuando baja la percepción visual reaccionamos peor ante posibles imprevistos provocados por otro coche.
La distancia entre vehículos no debe ser inferior a tres segundos, aproximadamente entre 28-60 metros de distancia.
Antes de comenzar tu viaje deberías revisar el buen funcionamiento de las luces. Faros inteligentes, con xenón o luces LED serían tecnologías que ayudarían bastante a la hora de propiciar la seguridad en la carretera de noche.
Igual que en autopistas o en autovías bien iluminadas no se debe usar las luces largas, cuando la iluminación es escasa, no hay otro vehículo delante y es una vía muy poco iluminada, sí se puede usar esta luz.
Es muy importante que hagas el viaje asegurándote que cada uno de los espejos y cristales del coche, que te dan esa visibilidad muy necesaria en las carreteras de noche, estén bien limpios. Además, ya no tienes excusa para tener cada uno de los cristales y espejos del coche perfectos, ya que desde bp queremos facilitarte todo para tengas tú coche los más limpio posible a través de nuestras nuevas promociones de lavado.
Es un consejo que se repite continuamente, pero nunca está de más repetirlo, ya que si conducir cansado y con sueño durante el día ya es un gran factor de riesgo, cuando cae el sol este factor se multiplica.
Siempre que hagas un viaje, antes de partir debes estar bien descansado.
Ante de empezar a viajar, mira bien las carreteras por las que vas a hacer la ruta y elige las más seguras y en mejores condiciones. Las carreteras secundarias/comarcales, suelen estar en peor estado y ser más estrechas, por lo que, si decides recorrerlas por la noche, debes tener mucho cuidado y estar muy atento.
En caso de sentir que los párpados empiezan a pesar, deberás parar y descansar un rato. Piensa que no pierdes 30 minutos, sino que ganas en seguridad y vida.
En el momento en el que sientas cualquier síntoma de fatiga también puedes optar por beber una bebida energética, un café o algún alimento estimulante como chocolate negro.
Como hemos comentado antes, la visión por la noche al conducir se reduce mucho, por lo que hay que estar mucho más atento. Si conduces a grandes velocidades, la capacidad de reacción se reduce y por la noche mucho más, siendo aconsejable adaptar la conducción a la velocidad recomendada para cada tipo de vía o incluso menor, según las condiciones de iluminación de la carretera.
La carretera y tu entorno deben de estar muy controlados, ver por el retrovisor no cuesta nada y por la noche se aconseja mirar los retrovisores cada 10 segundos.
Si conducir de noche puede suponer más riesgo, conducir también con malas condiciones climatológicas no es lo más recomendable. Unos días antes de viajar, te recomendamos que mires el tiempo para saber la situación climatológica que haya el día de tu viaje.